Archive for agosto 2012
La Violencia Intrafamiliar
La familia es la piedra angular de la sociedad y en la
actualidad observamos una alta tendencia a la desintegración familiar, en parte
producto de la violencia.
Se
define la violencia intrafamiliar como aquella que tiene lugar dentro del hogar
o la familia, ya sea que el agresor comparta o haya compartido el mismo
domicilio. Comprende, entre otros, la violación, el maltrato físico,
psicológico y el abuso sexual.
Existen cuatro grupos que son los más afectados dentro
de la familia: niños (as), adolescentes, mujeres adultas, personas mayores y personas
con alguna discapacidad o problemas de salud.
La violencia intrafamiliar tiene varios tipos de
manifestación:
Violencia física: Es una forma de agresión en la que se emplea la
fuerza física, en algunos casos hasta llegar a la muerte, para conseguir que
una persona haga algo en contra de su voluntad.
Violencia psicológica o
emocional: Es la continua
degradación y subestimación por parte de una persona hacia otra.
Violencia sexual: Es una forma de agresión que se expresa en
diferentes grados, desde las burlas y comentarios ofensivos u obscenos hasta
comportamientos sexuales forzados mediante amenazas, intimidaciones o presiones
físicas o psíquicas.
Consecuencias para la Salud Física: Lesiones, pérdida parcial de la visión o de
la audición, huesos rotos, ojos amoratados, mordeduras, quemaduras, heridas de
armas blancas, abuso de drogas, embarazo no deseado y dolores de cabeza.
Consecuencias para la Salud Mental: Depresión, Ansiedad, Trastorno Obsesivo-Compulsivo, Trastorno de Estrés Post-Traumático, y resultados fatales como: suicidio y homicidio.
Alzheimer: 10 posibles indicadores
Alzheimer,
una enfermedad neurodegenerativa que aún no tiene cura. No se sabe con
exactitud qué causa la enfermedad, pero ya se han identificado ciertos factores
que influyen en su desarrollo.
La edad, es quizá el factor de mayor riesgo. A partir de los 65 años aumenta la
probabilidad de padecerlo.
La genética. En términos genéticos la aparición de la
enfermedad se considera “esporádica”; puede presentarse independiente a una
condición hereditaria. No obstante, el
10% de los pacientes con Alzheimer hereda “mutaciones en uno de tres genes en los
cromosomas 1, 14 y 21”. En estos casos la enfermedad puede manifestarse a
partir de los 35 años de edad.
En el resto
de los pacientes, que son la gran mayoría, se han identificado un grupo de
genes denominado apolipoproteína E (ApoE), el cual adquiere tres formas: ApoE2,
ApoE3 y ApoE4. Por un lado el contar con la forma de ApoE2 puede significar una
protección contra la enfermedad; por el otro, el ApoE4 puede incrementar las
posibilidades de desarrollarlo. Sin
embargo, este tipo de aparición tardía de la enfermedad no se presenta por
patrones hereditarios.
Afecciones cardiacas y diabetes tipo 2. Las enfermedades cardiovasculares, el colesterol
elevado, la hipertensión, accidentes cerebro vasculares, así como la diabetes
tipo 2 pueden incrementar la posibilidad de padecer la enfermedad.
Según la
Asociación Dominicana de Alzheimer, estos son diez posibles indicativos de la
enfermedad:
1- ¿Se le olvidan las palabras o usa
palabras incorrectas para expresarse?
2- ¿Se le olvidan qué son los objetos y
cómo utilizarlos?
3- ¿Se olvida frecuentemente de hechos
recientes?
4- ¿Se le hace difícil llevar a cabo
tareas de rutina como poner la mesa o servir la comida?
5- ¿Se desorienta y no sabe dónde está
o cómo llego allí?
6- ¿Lleva a cabo acciones irracionales
que demuestran falta de sensatez?
7- ¿Guarda objetos en lugares absurdos?
8- ¿Muestra cambio drástico de actitud
o comportamiento?
9- ¿Muestra cambio drástico de
personalidad?
10- ¿Demuestra falta de iniciativa para
desempeñar acciones simples?
Aclaran que
estas señales pueden deberse a distintas condiciones, pero de tratarse de
Alzheimer lo mejor es obtener un diagnóstico temprano.
En la
actualidad existen muchas investigaciones para tratar de encontrar un
tratamiento preventivo o la cura total del Alzheimer. Este se ha convertido en
la segunda causa de muerte mundial y se estima que hay alrededor de 35 millones
de personas que la padece.
El Duelo
Lic. Edwin Contreras
El duelo es un proceso que es producto de una pérdida, ya sea de algo tangible, como un ser querido o un objeto de valor, también puede ser por un divorcio o pérdida de estatus en el trabajo.
La pérdida de alguien que la persona siente cercana y el proceso de ajustarse a ella, puede afectar casi todos los ámbitos de su vida. La persona que pasa por una pérdida debe comprender que a pasar por emociones necesitará del apoyo de sus familiares y amigos, y en muchos casos tendrá que solicitar la ayuda de un profesional para poder afrontar la pérdida.
El duelo se suele manifestar de manera diferente en el hombre y la mujer. El hombre tiende a inhibir sus sentimientos, enfocarse en la resolución de problemas y no en la expresión de los sentimientos, y los sentimientos que expresa son rabia o culpa, se expresan en privado y generalmente no busca ayuda.
En cambio la mujer expresa su angustia por medio de lamentos y lágrimas, se les hace difícil expresar rabia, no teme expresar sus emociones en público y busca ayuda.
El pasar tiempo no va a solucionar la pena, a menos que se realice un proceso de duelo donde se enfrenten las emociones y adopten los cambios necesarios. Si se inhibe el dolor permanecerá agudo y traerá otras complicaciones.
Si sientes una total negación de la muerte, sentimientos irracionales de culpabilidad, aislamiento social, apatía crónica, depresión y un temor persistente es de vital importancia que busques ayuda profesional.
El sexo débil: una concepción muy arraigada en la sociedad.
Un día
cualquiera vamos de camino al trabajo. Todos un poco retrasados debido al
embotellamiento; un conductor desesperado ante el vehículo que no avanza frente
a él dice: Esa tiene que ser mujer. Yo no sé pa’que le dan licencia…
Este tipo
de pensamiento es producto de la ideología patriarcal en que crecemos y somos
educados. El mismo pone de manifiesto cuan fuerte es el modelo mujer-hombre que
impera en nuestra sociedad.
Este modelo
social basado en roles de masculinidad y feminidad establece que la mujer sea
la cuidadora, la especialista en emociones, es la única que puede desempeñar
trabajos del hogar, y está destinada a ocupar puestos “femeninos” en las
empresas. Por otro lado entiende que el varón es el proveedor, la cabeza del
hogar, de la sociedad, del Estado, el que no puede mostrar sus sentimientos
porque de lo contrario sería un “mariquita”.
Es
precisamente esa mentalidad de supremacía del hombre hacia la mujer que lleva a
la discriminación y al abuso a ser vistos como algo normal.
El auge que
está teniendo el Bullying escolar o acoso escolar deja entrever la incapacidad
que tenemos para frenar la violencia y transmitir valores que comprendan la
autoestima, la asertividad, el respeto, la igualdad y la empatía hacia los
demás.
Un ejemplo
muy familiar es cuando los padres le dicen a un niño “no llores que los hombres
no lloran”, en este momento están frenando el derecho del niño a manifestar sus
emociones, no obstante le crean prejuicios basados en su rol. De ahí que el
hombre reaccionará con violencia cuando no puede ejercer ese rol de “superioridad”
que le exige el entorno.
Esto no es
algo actual, desde los inicios de la civilización la mujer ha sido objeto de
maltratos y segregación. En la antigüedad los griegos y los romanos la
denigraban y la catalogaban como seres poco confiables que debían ser tratados
bajo las mismas condiciones que los esclavos y convictos.
Durante la
Revolución francesa se redacta la Declaración
de los derechos del hombre y del ciudadano en el 1789, en esta no figuraba
la palabra mujer entre sus artículos. No fue, sino, hasta 1791 cuando la francesa
Olympe de Gouges reclama un trato igualitario para las mujeres y escribe en
contraposición la Declaración de los
derechos de la mujer y la ciudadana.
La
erradicación de la violencia en todos sus aspectos debe empezar por la
educación en valores de igualdad y respeto.
Posted by Pao-Li
Frustración infantil: entendiendo las rabietas.
Educa al niño y no tendrás que corregir al
adulto, decía Pitágoras en los tiempos de la Grecia antigua. Este filósofo no
pudo haber arrojado más luz ya que es precisamente en la educación donde yace
la clave para un correcto comportamiento.
Los niños tienen diferentes formas de
expresarse. Alcanzada la edad de
adquisición del lenguaje y al desarrollar habilidades motrices ellos inician el
confuso camino hacia la autonomía e independencia. Se inicia con el deseo de hacer todo “solos” y
a medida que ganan equilibrio y fuerza quieren
igualarse a los adultos. Forma que adoptan para sentirse identificados.
Es entonces de su intento por hacer las cosas
que hacen los “adultos” cuando vienen los berrinches y frustraciones ante la
negativa de los padres o cuando algo no sale o no se hace como ellos quieren y
esperan. Frustraciones que incluso los
adultos sentimos, la única diferencia es que ya hemos creado un mecanismo de
reacción ante ellas.
Es entre los dos y cuatro años de edad cuando
los niños tienden a reaccionar de manera desobediente: pataletas, gritos,
llantos, algunas veces hasta mordidas y golpes. Esto puede resultar exasperante
para los padres, especialmente si se encuentran en un espacio público o fuera
de la casa.
Sin embargo, este comportamiento es
comprensible ya que los niños aún no aprenden a identificar como se siente y
por ende no pueden lidiar con la frustración que implica el no poder hacer las
cosas como quieren.
En este momento es necesario que los padres les
ayuden a comprender. Por un lado que los niños entiendan que con ese
comportamiento no van a conseguir ni una
respuesta afirmativa por parte de sus padres, ni lograr un buen desempeño en
caso de que se sientan frustrados ante algún juguete o tarea.
Se recomienda que cuando los niños reaccionen
con gritos y rabitas los padres los ignoren y le den a entender que están
dispuestos a ayudar siempre y cuando él o ella den fin a ese comportamiento. Esta
actitud debe ser constante no importa si se está en el hogar o en un espacio público.
Esto funciona ya que si el niño o la niña no
tienen público tampoco obtienen resultados. Luego de que se haya calmado, lo
mejor es hablar con él o ella sobre lo sucedido y darle la opción del dialogo
ante situaciones similares.
El
objetivo es que los niños no vean a las rabietas como la manera en la que puede
obtener la atención de sus padres, y siempre que opte conversar antes que
llorar o gritar hay que felicitarles y decirles que se sienten orgullosos de
ellos.
También es importante que los padres aprendan a
conocer a sus hijos. Por lo general, hay situaciones en las que este
comportamiento puede aumentar, como cuando tienen hambre, sueño o se sienten
cansados. Teniendo conocimiento de ello los padres pueden prevenir y
evitar los berrinches.
La tarea de educar a un niño es ardua y
sumamente estresante. Otro consejo es
tratar de “negociar” con ellos, en un intento de que adquieran confianza y aprendan
a tomar decisiones. Es necesario entender que el niño o la niña está luchando
por su autonomía e imponerle reglas sin una explicación del por qué lleva a la
confusión y al rechazo por parte de ellos.
Darles participación en las decisiones que les
afectan; darles a entender que ellos aún son niños y que tienen mucho que
aprender; explicarles por qué no pueden actuar o hacer cosas como los adultos
crea una base basada en la confianza, la seguridad y en la empatía.
Inteligencia emocional
Ruben Almanzar
Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo.
Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el
momento oportuno. Con el propósito justo y del modo correcto, eso,
ciertamente, no resulta tan sencillo.
Aristóteles, Ética a Nicómaco.
Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo.
Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el
momento oportuno. Con el propósito justo y del modo correcto, eso,
ciertamente, no resulta tan sencillo.
Aristóteles, Ética a Nicómaco.
Imagìnate que has estado esperando a una persona por varios minutos, luego de 30 minutos te empiesas a desesperar: "es el colmo, esto es una falta de respeto, he esperado demasiado y ni siquiera se ha dignado en llamar. Te sentirìas enojado(a)". Luego dices: "y si le pasò algo, se habrà accidentado, lo(a) habràn asaltado(a)? Te sentirìas preocupado(a). Luego dirìas, no, si le hubiese pasado algo ya lo hubiese sabido, lo que pasa es que el/ella puede hacer conmigo lo que quiera. Si te das cuenta tus sentimientos cambiaron de manera muy ràpida y dràstica, lo suficiente para emitir un juicio sin fundamentos reales. Normalmente lo que hace que nuestros sentimientos cambien de manera tan ràpida y a la vez tan contraria es nuestra forma de pensar, aunque en el ejemplo anterior tus sentimientos cambiaron, la situaciòn siguiò siendo la misma.
La palabra EMOCIÓN, que produce del latín "MOTERE" (moverse) define a la capacidad que tenemos de movernos, acercándonos hacia algo o alejándonos de algo. Disponemos de la emoción para orientarnos, a modo de brújula, en cada situación, buscando aquellas situaciones que nos son favorables y alejándonos de las negativas.Se consideran emociones a las reacciones subjetivas al ambiente acompañadass de respuestas neuronales y hormonales; se consideran reacciones de tipo adaptativo que afectan a nuestra
manera de ser.
Durante nuestra vida tratamos de crecer, estudiar, tener una profesiòn, alcanzar grandes puestos o estàtus dentro de una empresa y/o la misma sociedad, acumular riquezas, tener una familia, en fin, lo que muchos llaman tener "èxito". Andamos tan apurados en la bùsqueda de ese "èxito" que muchas veces nos ovidamos que todo lo que hemos construido con tanto esfuerzo y trabajo en un segundo se derrumba y de la manera màs sencilla. No importa el èxito acadèmico o personal que puedas lograr, si no sabes cultivar la manera en còmo expresas tus emociones, esto es lo que mejor conocemos como: "inteligencia emocional", definido como: la capacidad que tienen las personas para
darse cuenta de sus propios sentimientos y de los demás. Daniel Goleman
fue el que dió fama a este tipo de inteligencia.No existe un test capaz
de determinar el grado de inteligencia emocional. Pero Jack Block,
psicólogo de la universidad de Berkeley, ha utilizado una forma de medir
la inteligencia emocional que él denomina «capacidad adaptativa del
ego», y añadiéndole un coeficiente intelectual, parecido al coeficiente
intelectual utilizado en los test de inteligencia normal. De èsta capacidad dependen nuestras relaciones interpersonales, ya que sin ella serìa imposible relacionarnos con personas tan diferentes a nosotros, con conductas tan diferentes y viviendo en una vida tan estresada y con tantas presiones (laboral, familiar, profesional, etc.)
Posted by Bienestar Emocional
La Autoestima
La autoestima es la valoración positiva o negativa que se tiene de uno mismo. Esta está compuesta por dos elementos esenciales: la eficacia personal y el respeto a uno mismo.
El primero se refiere a la confianza: en el fundamento de la mente, capacidad para pensar y entender, capacidad para aprender, elegir y tomar decisiones y creer y confiar en sí mismo. El segundo se basa en la actitud positiva hacia el derecho de vivir y ser feliz, y el confort al reafirmar de forma apropiada los pensamientos, deseos y necesidades. Ambos elementos son esenciales de la autoestima, si falta uno de estos, ésta se deteriora.
La eficacia personal genera un sentimiento de control sobre la vida de las personas el cuál está asociado con un bienestar psicológico. Tener una autoestima alta es sentirse confiadamente apto para la vida, por otro lado poseer una autoestima baja es sentirse inapropiado para la vida, a su vez tener una autoestima mediana es estar entre apropiado e inapropiado.
La eficacia personal no es la certidumbre de que seremos capaces de dominar todos y cualquier desafío que se nos presente en la vida; es la convicción de que somos capaces de pensar, juzgar y corregir nuestros errores.
Cuando carecemos de la experiencia de la eficacia personal, anticipamos el fracaso en lugar de la victoria; es decir, interrumpimos o paralizamos los esfuerzos para enfrentar la dificultad que se nos presente.
El respeto a uno mismo es la convicción de que vale la pena actuar, proteger y alimentar la vida y nuestro bienestar; de que somos buenos y merecemos el respeto de los demás, no es la convicción de que somos perfectos o mejores que los demás.
La autoestima se expresa:
- Confort que experimentamos en dar y recibir cumplidos.
- En la tranquilidad con la que se habla de los logros y defectos de manera directa y honesta.
- Cuando las palabras y los movimientos se caracterizan por la tranquilidad.
- Espontaneidad que se reflejan por el hecho de que no estamos en guerra con nosotros mismos.
- Actitud de mostrar curiosidad y estar abiertos a nuevas ideas.
- Capacidad de disfrutar de los aspectos alegres de la vida de uno mismo y los demás.
Alzheimer: cuando la memoria se apaga.
Olvidar dónde
hemos dejado las llaves o el nombre de un familiar ‘lejano’ nos puede suceder a
todos. Pero cuando no recordamos el nombre de nuestro cónyuge o cuando nuestra memoria a corto plazo empieza
a fallar son indicios de que algo no está bien con nuestro cerebro. Esto es lo que
les sucede a los pacientes con Alzheimer.
El
Alzheimer es un tipo de demencia y una enfermedad neurodegenerativa, en la que
la degradación cerebral es crónica y se transmite de neurona a neurona. La
enfermedad se presenta, por lo general, después de los 65 años. Aunque, a
diferencia de lo que se pensaba en décadas pasadas, ésta no forma parte de la
vejez. Si bien es cierto que los olvidos son más frecuentes entre los
envejecientes el deterioro progresivo del Alzheimer comprende otros síntomas
como: desorientación, dificultad de razonamiento, pérdida de la autonomía y
trastornos conductuales.
Según investigaciones,
la incorrecta desintegración y acumulación de dos proteínas en la corteza
cerebral: la beta amiloide y Tau van formando placas y ovillos que interfieren
con la comunicación entre las neuronas, y provocan, posteriormente, la muerte
de las mismas. Los científicos aún no han identificado si esto sea una causa o
consecuencia del Alzheimer.
La
enfermedad, al parecer, se inicia en el hipocampo, estructura cerebral que se
asocia con la formación de nuevos recuerdos, este se va destruyendo lentamente,
y es por esto que los pacientes con Alzheimer no pueden contener memorias
recientes. Así, a medida que más placas y ovillos se van formando, otras áreas
cerebrales se ven comprometidas. Desde la planificación, el procesamiento
lógico, la conciencia y el control de las emociones. Eventualmente la
enfermedad invade el área del cerebro que da sentido a nuestro alrededor, y es
en esta etapa donde los pacientes pueden desarrollar alucinaciones.
La muerte
neuronal sigue su curso hasta llegar al área donde almacenamos nuestros
recuerdos más antiguos y preciados. Lentamente se van comprometiendo los
procesos autónomos del cerebro como la respiración y el bombeo del corazón, es
entonces, cuando el paciente muere. Este proceso puede tomar entre 8 a 20 años,
y hasta ahora es incurable.
Se calcula
que hay más de 26 millones de personas que padecen la enfermedad, y se
pronostica que la cifra se duplicaría en el 2050 de no encontrarse una cura o
una manera de controlarlo.
Para
quienes la padecen, la enfermedad es devastadora no sólo cambia a un ser querido
sino a toda la familia. La confusión emocional que enfrentan los pacientes y
los familiares puede resultar abrumadora, por eso es recomendable informarse y
buscar grupos de apoyo.
En la
República Dominicana hay alrededor de 400 y 500 mil personas conviviendo con el
Alzheimer. La Asociación Dominicana de Alzheimer cuenta con grupos de
apoyo y capacitación para las familias
que atraviesan por este largo y doloroso camino. Si bien aún no se ha encontrado
la cura para la enfermedad es mucho lo que se puede hacer con un diagnóstico
temprano.
¡Bienvenidos!
En nombre del equipo de Bienestar Emocional te damos una cordial bienvenida a nuestro blog. En este espacio estaremos publicando artículos y eventualmente colgaremos nuestros programas y actividades. Deseamos de todo corazón que nos acompañen en esta travesía que inicia formalmente el domingo 12 de agosto por la Radio CTC sombrero en la 95.5 FM.
Les estaremos acompañando Paola Mejía, Edwin Contreras y Rubén Almanzar. Nuestra área de trabajo: Psicología Clínica. Estamos comprometidos a informar y concientizar a nuestros seguidores sobre la actualidad psicológica y social.
Posted by Bienestar Emocional